Cuando usen zapatos procuren que estén perfectamente bien boleados

Esto es una buena idea porque

1. La maestra te pone diez en aseo
2. A veces hay que joderse e ir de tacuche a algún lugar (esto debe evitarse a como de lugar y capitular en usarlo solo cuando sea estrictísimamente necesario, de cuestión de vida o muerte para arriba) y puedes llevar el mejor traje del mundo pero si llevas zapatos mal boleados te vez mal. No desarreglado sino incoherente.
3. Los boleros son gente fenomenal. Raro es el bolero (y el barbero, del cual hablaré pronto) que no tiene buena conversación, sagazidad en los albures y, sobre todo, información privilegiada sobre el lugar donde reside. En serio, en los pueblos chicos (y en las colonias de las ciudades grandes) el bolero es el FBI local. Siempre déjen propina.
4. Con zapatos bien boleados y brillosos podrás verle los calzones a las niñas cuando traigan falda.